En Abril de 1980 pocos españoles conocíamos el golf, pero sucedería un hecho histórico que lo cambiaría todo. Con 23 años Severiano Ballesteros ganaba su primera chaquete verde en Augusta convirtiéndose en el primer europeo en conseguirla y en el más joven ganador del Masters de Augusta. TVE la única televisión que existía en aquellos años, se hizo eco de la noticia al lunes siguiente, y nos anunció que intentaría conseguir un resumen del torneo para emitirlo, por lo visto había logrado un hazaña de alcance mundial, pero todavía no eramos muy conscientes de lo conseguido por el cántabro.
A los dos días en la entonces llamada Segunda Cadena, y a la hora de la merienda, se emitió un resumen del torneo. Reconozco que quede impresionado con lo que vi, ese día los deberes del colegio quedaron en un segundo plano, y recuerdo atónito contemplar el más grandioso torneo de golf rendido ante las genialidades de un maestro como Seve. Ese día descubrí el golf, el maravilloso campo del Augusta National y al gran Severiano Ballesteros.
En el año 1984, Seve ganaba su segundo Open Británico en San Andrews en disputa memorable con el americano Tom Watson. Era todo un ídolo a nivel mundial, y lo más importante para él, ya se le reconocían sus hazañas en su país, los grandes torneos se emitían por tv, y todos ya sabíamos lo que era un birdie, un put, un eagle, un bogey y sus geniales aproach…
Seve como profesional de La Manga Club, realizó una visita a finales de septiembre a sus instalaciones, para impartir un clinic por la mañana y por la tarde jugar 18 hoyos con varios socios del club. El padre de un amigo socio del club, me invitó a compartir esa jornada con Seve y por supuesto que dije que sí. Siempre le estuve agradecido por darme la oportunidad de conocer a un Seve cercano, amable, educado, tímido pero a la vez divertido. Todavía recuerdo sus imitaciones a los jugadores de esa época y entre todas, las que hacía de Nick Faldo y la del pequeño gran hombre Ian Woosnam ¡muy grande!, rodeados de ingleses y J.G y yo como únicos compatriotas suyos en la master class de la mañana.
Fue una bonita experiencia el poder recorrer el campo Sur de La Manga con él, sus consejos a los socios, sus bromas, sus golpes... Cuando termino el recorrido, nos marchamos a la casa club, se nos acercó, nos pidió un cigarro, comentamos el partido, y nos despedimos de él. Seve estaba en la cima del mundo y nosotros habíamos tenido el privilegio de estar ¡a su lado!
Tengo poquísimos, pero Seve fue mi primer ídolo, y como el primer amor, no se olvida. Hoy se nos ha ido, el mulligan que le ha dado la vida se le terminó como él decía. Ayer era un jugador legendario, hoy ha pasado a ser un mito. Gracias por lo mucho que nos has dado, nunca te olvidaremos…
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