Desde el año 2002 Londres ha vuelto a celebrar a principios de diciembre su tradicional Frost Fair, en Bankside entre el Tate Modern y el Globe Theatre , en pleno paseo de la Reina Isabel II a orillas del rió Támesis, hoy es una feria navideña con diversas actividades lúdicas, mercadillo, conciertos, pista de patinaje y otros entrenamientos, pero esa feria nos recuerda que hubo un tiempo en el que el Támesis se helaba de tal forma que podían desarrollarse en su cauce las principales actividades de la ciudad como las antiquísimas Frost Fairs de Londres, cuando las condiciones atmosféricas lo permitían.
En efecto, en el libro “El Támesis y sus afluentes” escrito por Charles Mackay en 1840, vienen recogidas los años y duración de las heladas del Támesis desde el año 250.
Aunque el libro recoge muchas de las heladas del Támesis, algunas de ellas sin documentar, no están todas, fueron muchas más, pero la primera que menciona el libro es la del año 250 que duró nueve semanas y la ultima la del año 1814 cuya duración fue de seis días.
En el año 695 habla del primer mercado de hielo en el Támesis, donde se establecieron varios puestos donde se intercambiaban diversas mercancías, y la primera Frost Fair documentada es la del año 1684. El 16 de diciembre de 1684 las difíciles condiciones meteorológicas congelaron el río Támesis mas allá del Puente de Londres, los barcos que quedaron atrapados comenzaron a vender cerveza y licores, recibiendo multitud de personas convirtiéndose en el principal lugar de diversión para los londinenses, al mismo tiempo que puestos de venta construidos por comerciantes que generalmente frecuentaban ferias y mercados se trasladaron al río vendiendo latón, cobre, estaño, hierro, juguetes así como los típicos vendedores ambulantes de fruta y otros puestos de comida, mezclándose con otras diversiones para la multitud como podrían ser puestos para beber y para comer. Los londinenses pronto la llamarían la Frost Fair.
La ultima Frost Fair se celebró en el año 1814, el martes 1 de febrero el río se congeló y al día siguiente todo el cauce se convirtió en una feria, se alinearon una treintena de puestos de venta a ambos lados de la improvisada calle principal, adornados para la ocasión con serpentinas, en ellos se podía beber, jugar a los bolos, bailar y otras diversiones como patinar.
Con el paso de los días la feria fue creciendo, tanto en número de visitantes como de diversiones, se establecieron nuevos puestos de tiovivos, barcazas móviles, puestos de libros y de juguetes.
El sábado quinto día de la feria la lluvia comenzó a caer y el hielo a agrietarse amenazando todos los puestos instalados en la feria, el deshielo fue rápido y ya el domingo por la mañana comenzó a romperse el hielo y con él la que a la postre sería la última Frost Fair.
Fuentes y fotografías:
thames.me.uk/s00051.htm
http://www.barbsweb.co.uk/history/frostfair.htm
http://forums.canadiancontent.net/history/65837-old-london-bridge-1209-1831-a.html
4 comentarios:
Es curioso como el progreso acaba con algunas tradiciones.
Cualquier excusa es buena para tener una fiesta.
Salu2
Pues si Markos, en este caso el progreso y también en buena medida no "difrutar" con las extremas condiciiones meteorológicas de hace mas de 200 años.
No quiero decir que este fenómeno se deba al conocido cambio climático pero lo cierto es que hace más 400 años se vivió una pequeña era glaciar que producía las prolongadas heladas del rio Támesis.
Un saludo para ti también y gracias por tu comentario.
Muy interesante esta entrada Rick.. excelente!!
Un abrazo
Muchas gracias Balo, que tengan un buen fin de semana.
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